lunes, 22 de agosto de 2011

Lecciones de la Vida y Deceso de Doroteo Guamuch Flores (Mejor Conocido como Mateo Flores)

¿Le gustaría se un Héroe admirado y homenajeado todo el tiempo?

¿Le gustaría que hicieran monumentos en su honor?

¿Le gustaría ser recordado con admiración para la posteridad?

En toda la historia de la humanidad ha habido héroes que han hecho grandes proezas  militares, sociales, científicas y deportivas más allá de lo que el resto de mortales hemos podido ni siquiera imaginar.
Nombres como Alejandro Magno, Gandhi, Einstein o "Mateo Flores" (Doroteo Guamuch Flores, su verdadero nombre), saltan a la palestra de los superdotados.


El caso del héroe deportivo, ganador del Maratón de Boston y Campeón Panamericano en Atletismo, entre muchos otros logros, Don Doroteo Guamuch Flores, es muy especial para ilustrar la particular forma de "estimar" y "honrar" que tenemos los seres humanos.

Don Doroteo Guamuch fue un Atleta que se hizo por sus propios medios, cuando aún no existía el patrocinio de marcas comerciales.  Lo que sí ya existía y siempre ha existido hasta el día de hoy, era que los poderosos de turno aprovechan los logros de un connacional para muchísimos propósitos como:
  • Distraer la atención de los gobernados de problemas medulares.
  • Exaltar los sentimientos nacionalistas aunque las condiciones sociales y económicas del país no sean las más óptimas o por lo menos las mínimas para vivir dignamente para la gran mayoría.
  • Aprovechar cualquier excusa para echar mano del Erario público.
  • Mantener el protagonismo y notoriedad delante de los gobernados con múltiples e interminables ceremonias, pompas y demás actos públicos.
  • Que los gobernados tengan íconos prefabricados que veneren y mantengan el constante bombardeo mediático para manipular a las masas a su antojo y conveniencia.
La lista podría extenderse mucho más, pero baste por ahora con estos pocos ejemplos.

Datos a Considerar
Hay algunos aspectos de la vida de Doroteo Guamuch Flores que deberíamos considerar:
  • En su honor al Estadio Nacional le pusieron su nombre (monumental para los recursos y época del país cuando fue construido); cambiándolo claro está, a uno más “ladinizado”.  De Doroteo Guamuch Flores pasó a llamarse “Mateo Flores”.  Cosa que nunca fue del gusto y agrado del “homenajeado”, pero igual, poco importaba su opinión en cuanto sirvieran sus triunfos deportivos para “engrandecer a la nación y el espíritu nacionalista”.
  • Como dato curioso, pero no del todo extraño en este país, en una ocasión no se le permitió entrar al Estadio que llevaba su nombre (cambiado) por no tener para la entrada.
  • A pesar de ser “homenajeado” constantemente, siempre vivió y murió en las condiciones más sencillas y limitadas económicamente hablando.  Al punto de que fue su expresa voluntad ser velado en su casa de habitación, en una galera de láminas.
  • Incluso una calle contigua a su residencia fue nombrada en su honor.
  • En otra ocasión cuando una marca de pinturas, para sus propios fines publicitarios, estaba pintando el Estadio Nacional, Don Doroteo Guamuch le confió a un amigo que cómo hubiera deseado que algo de ese capital se lo hubieran donado para ayudarse un poco.
  • Ya en sus últimos días de vida no tenía suficiente para los gastos de su enfermedad y como siempre, tenía qué depender de la “caridad” de los demás, que quisieran lograr notoriedad “ayudándole”.

Preguntas Retóricas
  1. ¿Cómo se sentiría usted si le profesaran respeto y devoción y no los recibe efectivamente sino sólo de palabra?
  2. ¿Cómo se sentiría usted si levantaran monumentos en su honor pero los recursos se destinan sólo para la construcción y mantenimiento de dichos monumentos y no para usted?
  3. ¿Cómo se sentiría si le negaran el acceso a los monumentos levantados en su honor?
  4. ¿Qué pensaría de que otros aprovechen más que usted mismo o mejor dicho, que otros y no usted, aprovechen los “honores” hacia usted?
  5. ¿Cómo se sentiría si otros sólo lo han utilizado a usted para su propio provecho?
  6. ¿De qué le serviría tanto homenaje si le dan tanta importancia a sus monumentos y a los actos protocolarios mismos y a usted lo olvidan?
  7. ¿Le gustaría que usaran su nombre para campañas publicitarias de índole comercial, nacionalista, religiosa, etc. que sólo beneficiarán a otros y no a usted o a los que usted desearía beneficiar?
  8. ¿Y por encima de todo, que le cambien el nombre aunque usted no esté de acuerdo?
  9. ¿Le gustaría que otros se enriquecieran a costa de su buen nombre y sus logros que con tanto esfuerzo ha alcanzado?
 Existe ALGUIEN que también por siglos, buena parte de la humanidad (sobre todo en el mundo occidental), le ha profesado “devoción” pero que en cierta ocasión manifestó esto:

“Así habéis invalidado el mandamiento de Dios por vuestra tradición. Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, cuando dijo: Este pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me honran, Enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres.” 
(MATEO 15:6-9)

¿Pero por qué semejante reclamo?  Pues sencillamente porque Quien reclama dejó en un libro llamado Biblia toda Su Soberana Voluntad; misma que es ignorada, evadida o tergiversada (adulterada) por una inmensa mayoría de sus criaturas “devotas”.



En nombre de D—S se han erigido colosales templos, esculturas y toda clase de obras de arte a costa del lomo de esclavos.  Si antes eran obligados a puro látigo, ahora son obligados con la necesidad de ganar un salario mínimo y una “salvación merecida”.  La riqueza de los pueblos ha ido a parar en estos recintos del rito y la pompa mientras que las grandes masas de las clases sociales más pobres se han mantenido en la más infame miseria.
A lo cual El mismo responde:

“Como nada son todas las naciones delante de él; y en su comparación serán estimadas en menos que nada, y que lo que no es.
¿A qué, pues, haréis semejante a Dios, o qué imagen le compondréis?
El artífice prepara la imagen de talla, el platero le extiende el oro y le funde cadenas de plata.
El pobre escoge, para ofrecerle, madera que no se apolille; se busca un maestro sabio, que le haga una imagen de talla que no se mueva.
¿No sabéis? ¿No habéis oído? ¿Nunca os lo han dicho desde el principio? ¿No habéis sido enseñados desde que la tierra se fundó?
Él está sentado sobre el círculo de la tierra, cuyos moradores son como langostas; él extiende los cielos como una cortina, los despliega como una tienda para morar.
El convierte en nada a los poderosos, y a los que gobiernan la tierra hace como cosa vana. Como si nunca hubieran sido plantados, como si nunca hubieran sido sembrados, como si nunca su tronco hubiera tenido raíz en la tierra; tan pronto como sopla en ellos se secan, y el torbellino los lleva como hojarasca.
¿A qué, pues, me haréis semejante o me compararéis? dice el Santo.” 
(ISAIAS 40:17-25).

“…si bien el Altísimo no habita en templos hechos de mano, como dice el profeta: El cielo es mi trono, Y la tierra el estrado de mis pies.
¿Qué casa me edificaréis? dice el Señor; ¿O cuál es el lugar de mi reposo? ¿No hizo mi mano todas estas cosas?
¡Duros de cerviz, e incircuncisos de corazón y de oídos!
Vosotros resistís siempre al Espíritu Santo; como vuestros padres, así también vosotros.” 
(HECHOS 7:48-51)

“¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?
Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro
cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.”
(1ª. CORINTIOS 6:19,20)

El resultado de esta espantosa ignorancia o explícita indiferencia a la Voluntad Soberana del Creador ha dado lugar a que se destine toda la riqueza de los pueblos al mantenimiento de la maquinaria religiosa y se descuide y se deje morir de hambre y abandono a las criaturas de D—S que realmente serían los verdaderos templos donde El habitaría.



Irónicamente, al que se le ha profesado “Devoción” se le niega la entrada.
Junto con El, se ha vedado el ingreso a los que El realmente se ha esmerado en rescatar al extremo que estuvo dispuesto a entregar a Su propio Hijo en manos de criminales.

“Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete. He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.”
(APOCALIPSIS 3:19,29)

“Si oyereis hoy su voz, No endurezcáis vuestro corazón…”
(SALMO 95:8)

Es tanta la “solemnidad” y “pulcritud” que debe expresarse en los lugares de culto que los que han caído en lo más bajo y sucio y maloliente de la sociedad como los niños de la calle, viciosos y prostitutas cuando llegan buscando encontrar a D—S, SON RECHAZADOS!

El colmo es que en las banquetas de los majestuosos templos donde se “profesa y proclama el amor” por las noches pernoctan los que han sido rechazados por la sociedad, en su mayoría, por no haber tenido oportunidades e incluso haber nacido en la misma calle.

“¿Por qué, dicen, ayunamos, y no hiciste caso; humillamos nuestras almas, y no te diste por entendido?
He aquí que en el día de vuestro ayuno buscáis vuestro propio gusto, y oprimís a todos vuestros trabajadores.
“¿No es más bien el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, soltar las cargas de opresión, y dejar ir libres a los quebrantados, y que rompáis todo yugo?
¿No es que partas tu pan con el hambriento, y a los pobres errantes albergues en casa; que cuando veas al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu hermano?”
(ISAIAS 58:3,6,7)



Muchos se han presentado delante de sus semejantes como “Representantes” de D—S y en Su Nombre, han engañado a la gran mayoría de la humanidad.
Esto lo han hecho muy fácilmente debido a la apatía de la mayoría de inquirir (examinar cuidadosamente) y poner a prueba las múltiples formas de impresionar y manipular que usan como “visiones”, “iluminaciones”, alegar ser “elegidos” como el “ungido”; además de los títulos pomposos que usan junto con sus elaborados montajes espectaculares en sus ritos.  De lo cual se dijo:

“Por tanto, así ha dicho Jehová sobre los profetas que profetizan en mi nombre, los cuales yo no envié, y que dicen: Ni espada ni hambre habrá en esta tierra; con espada y con hambre serán consumidos esos profetas.”
(JEREMIAS 14:15)

“Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe.
Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán.”
(MATEO 24:4,5)

“Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.”
(2ª. CORINTIOS 11:13-15)

“Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras, y aun negarán al Señor que los rescató, atrayendo sobre sí mismos destrucción repentina.
Y muchos seguirán sus disoluciones, por causa de los cuales el camino de la verdad será blasfemado, y por avaricia harán mercadería de vosotros con palabras fingidas. Sobre los tales ya de largo tiempo la condenación no se tarda, y su perdición no se duerme.”
(2ª. PEDRO 2:1-3)



En nombre de D—S se han formado colosales organizaciones eclesiásticas y para-eclesiásticas que se han constituido como verdaderas plataformas para exaltar el ego tanto de los fundadores y líderes como de los millones de miembros por el sentido, instinto y necesidad  de pertenencia.

No es lo mismo reunirse dos o tres en la intimidad y sencillez de un hogar, que dos mil o tres mil y hasta veinte mil o más en un auditorio espectacular con todos los avances tecnológicos, con decorados de mármol, oro, alfombras, sonido profesional, música, teatro, danza, “milagros” y toda una gama de interminables espectacularidades.

Al final del día estas auténticas “Babeles” han permitido desarrollar entramados jerárquicos  tan sofisticados, impresionantes e intimidatorios que se han atrevido a ponerse títulos honoríficos tan atrevidos que han rebasado la tolerancia de lo humildemente permitido.
A esto la Biblia dice:

“Yo Jehová; éste es mi nombre; y a otro no daré mi gloria, ni mi alabanza a esculturas.”
(ISAIAS 42:8)




Hoy en día los miles de “Ministerios”, “Iglesias”, Agencias y demás organizaciones eclesiásticas y para-eclesiásticas han tomado para sí, para identificarse, los diferentes nombres basados en atributos de D—S registrados en la Biblia.  De esa cuenta, cuando estas organizaciones o sus líderes debido a su insaciable avaricia y deseo de poder provocan la censura y la burla han dado lugar a la blasfemia de esos nombres de D—S.

“No tomarás el nombre de Jehová tu Dios en vano; porque no dará por inocente Jehová al que tomare su nombre en vano.”
(EXODO 20:7)

“Tú, pues, que enseñas a otro, ¿no te enseñas a ti mismo?
Tú que predicas que no se ha de hurtar, ¿hurtas?
Tú que dices que no se ha de adulterar, ¿adulteras?
Tú que abominas de los ídolos, ¿cometes sacrilegio?
Tú que te jactas de la ley, ¿con infracción de la ley deshonras a Dios?
Porque como está escrito, el nombre de Dios es blasfemado entre los
gentiles por causa de vosotros.”
(ROMANOS 2:21-24)



Resulta que ahora (y siempre ha sido así), TODO ES PAGADO!  Por supuesto, disfrazado de limosna, votos, ofrenda, pacto, siembra, diezmo, etc.
Se paga por ingreso, por membrecía, por ser  “ministrado”, absuelto, enviado al otro mundo, por casarse, por morirse, por ser bautizado, confirmado, por un “encuentro”, por seminario de “alabanza”, por retiros, por congresos, por “avivamientos”, etc.

De nuevo llegamos al momento de escuchar el látigo de Jesús en el Templo de Jerusalén y el ruido de los animales espantados al derribar las mesas donde las monedas son el único medio para “alcanzar el favor de D—S”.  De nuevo volvemos a oír esas palabras penetrantes de la más enfática protesta del Redentor:

“Y entró Jesús en el templo de Dios, y echó fuera a todos los que vendían y compraban en el templo, y volcó las mesas de los cambistas, y las sillas de los
que vendían palomas; y les dijo:
Escrito está: Mi casa, casa de oración será llamada; mas vosotros la habéis hecho cueva de ladrones.”
(MATEO 21:12,13)



Después de haber examinado todos los hechos y evidencias presentadas anteriormente no podemos quedarnos impávidos e indolentes ante la cruda realidad.
Como dice un presentador de radio:  “Podemos cerrar los ojos a la realidad, pero no a los recuerdos.”

¿En que segmento poblacional decidirá situarse y vivir?

¿En la gran masa que camina en el ritmo y dirección que le dicta el mundo?

¿De aquellos que aunque se juran amor “hasta que la muerte los separe” terminan divorciándose porque “ya no se comprendían” y se vuelven a casar en flagrante adulterio?  Pero igual, le quieren seguir “sirviendo a D—S” y mostrarle “devoción”.

¿De aquellos que le juran amor y devoción a D—S, pero que ni siquiera se toman el tiempo para leer, estudiar, meditar, memorizar y sobre todo vivir las Sagradas Escrituras?

¿De aquellos que atiborran los templos los domingos pero que son indiferentes a las miles de criaturas que mueren de hambre y abandono?

¿De los que en lugar de darle al necesitado, como demanda D—S, le dan al que ya tiene demasiado?
¿De aquellos que en grandes multitudes ostentan en público actos de “devoción” pero que con esto están haciendo exactamente lo que la Palabra de D—S prohíbe tajantemente?

¿O será parte de los pocos que aunque sean llamados “desadaptados sociales”, “resentidos sociales”, “renegados”, “negativos”, “que sólo viven juzgando”, etc.; han decidido no ser parte de este mundo sino se han convertido en “Extranjeros y Peregrinos” para los que la Patria Celestial está reservada, pero en la que “cosa inmunda no entrará”?

“Conforme a la fe murieron todos éstos sin haber recibido lo prometido, sino
mirándolo de lejos, y creyéndolo, y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra. Porque los que esto dicen, claramente dan a entender que buscan una patria; pues si hubiesen estado pensando en aquella de donde salieron, ciertamente tenían tiempo de volver. Pero anhelaban una mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza
de llamarse Dios de ellos; porque les ha preparado una ciudad.”
(HEBREOS 11:13-16)

“Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.
Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conoceréis.
¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?
Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos.
No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos. Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego.
Así que, por sus frutos los conoceréis.
No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.
Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre,
y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.”
(MATEO 7:13-23)



  • Si es de los millones y millones que creen las siguientes excusas:

“En la religión que me enseñaron mis padres en esa moriré.”
“D—S no me creó para condenarme.”
“Soy ‘bueno’ y no le hago mal a nadie, por lo que no puedo ser condenado.”
“Nadie es perfecto, D—S sabe que todos fallamos.”
“D—S siempre perdona”.  (Aunque no haya arrepentimiento).
“La Biblia sólo la entienden los Teólogos”.
“Creo en D—S, no soy ateo y eso debe ser suficiente.”
“Todos los días me encomiendo a ‘diosito’…” pero igual sigue viviendo como a usted le da la gana sin importarle siquiera conocer cuál es la Voluntad de D—S en Su Santa Palabra para su vida.

  • Si es de los que en lugar de ser responsable de llegar a conocer personalmente las Sagradas Escrituras y a Su Creador, se conforma sólo con seguir las tradiciones de los hombres y lo que los líderes religiosos dicen.

D—S en Su infinita misericordia hasta hoy, después de siglos y siglos de rebeldía de la humanidad, le sigue advirtiendo:

“No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.”
(GALATAS 6.7)

“La apariencia de sus rostros testifica contra ellos; porque como Sodoma publican su pecado, no lo disimulan.
¡Ay del alma de ellos! porque amontonaron mal para sí.
Decid al justo que le irá bien, porque comerá de los frutos de sus manos.
¡Ay del impío! Mal le irá, porque según las obras de sus manos le será pagado.”
(ISAIAS 3:9-11)

“He aquí el día de Jehová viene, terrible, y de indignación y ardor de ira, para convertir la tierra en soledad, y raer de ella a sus pecadores.
Por lo cual las estrellas de los cielos y sus luceros no darán su luz; y el sol se oscurecerá al nacer, y la luna no dará su resplandor.
Y castigaré al mundo por su maldad, y a los impíos por su iniquidad; y haré que
cese la arrogancia de los soberbios, y abatiré la altivez de los fuertes.”
(ISAIAS 13:9-11)
  • No es sólo de profesar “fe” y “devoción” a D—S y seguimos viviendo como a nosotros nos da la gana y no se vive conforme a Su Soberana Voluntad escrita fiel y completamente en la Santa Biblia.

“Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos.
El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él; pero el que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él. El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo.”
(1ª. JUAN 2:3-6)

  • No es sólo de declarar de labios que se ama a D—S si se ignora o evade Su Soberana Voluntad declarada en Su Santa Palabra, la Biblia.

“Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano.
Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar.”
(ISAIAS 55:6,7)

La Palabra de D--S

HEBREOS 4:12,13

12 Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discier ne los pensamientos y las intenciones del corazón.

13 Y no hay cosa creada que no sea manifiesta en su presencia; antes bien todas las cosas están desnudas y abiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta.